Las sorprendentes maniobras de Nicolás Montes, el equilibrista que rompió tres Guinness World Record

El mexicano Nicolás Montes de Oca, quien acaba de implantar tres Guinness World Records , aseguró este sábado que de alguna manera la vida es como un juego de malabaristas, la profesión con la que comenzó su camino como gimnasta de circo.

"La vida es como un juego de malabares, cambia de repente; el año pasado no sabía nada de los Guinness World Records y acabo de implantar tres", cuenta Montes de Oca en entrevista a Efe.

Originario de Amatlán de Quetzalcóatl, comunidad localizada en el municipio de Tepoztlán, estado de Morelos, el deportista-artista de 36 años fue validado esta semana con tres nuevas marcas mundiales de los Guiness.

En Barcelona hizo 23 paradas de manos con un solo brazo en un minuto, 41 de paradas de manos en un minuto y 32 paradas de manos alternas de un solo brazo en un minuto. Semanas antes había realizado una parada de manos con un solo brazo durante un 1:11.82 minutos y la duración más larga en realizar una parada de manos en una plataforma giratoria, 25.78.

"Todo esto es como jugar a ser niño y quiero mantenerlo el mayor tiempo que pueda. Lo más difícil de los últimos tres récords fue mantener la velocidad y el control", cuenta.

De joven Montes de Oca aprendió los juegos de malabares y se fue a las plazas públicas a hacer demostraciones, luego se fue a China y Ucrania, donde aumentó sus habilidades y fue contratado como parte del elenco del prestigioso Cirque du Soleil.

El mexicano celebra que su modalidad, pararse de manos, no sea de tanto desgaste, lo cual le permitirá seguir activo unos años más y buscar superar otros récords.

"La parada de manos con un solo brazo durante un 1:11.82 minutos la hice lastimado, quizás el año próximo intente pasar de dos minutos y quizás busque un sexto Guinness World Records, de velocidad dando vueltas parado de manos", confiesa.

El equilibrista mexicano aspira a que sus récords, más que alimentar su ego, inspiren personas del mundo a sobrepasar sus límites.

"Ante la imposibilidad de cambiar el mundo, cambiemos la perspectiva de verlo. Es mi lema de inspiración para superarme a mí mismo", asegura.