Tyson Fury sigue celebrando el título de peso pesado de la CMB conseguido el domingo pasado ante el estadounidense Deontay Wilder, en una batalla que duró once rounds.
El púgil británico que estuvo de fiesta en el complejo de entretenimiento Wet Republic, en la 'ciudad del pecado', al lado de su esposa, Paris, y de celebridades como Steve Aoki, ya volvió a su casa ubicada en la localidad de Lancashire (Inglaterra) para celebrar, ahora, en familia.
El boxeador de 33 años llegó a su nueva casa en las costas de Morecambe. A pesar de que la familia Fury ya tenía una casa en el sector, avaluada en 550.000 libras, compraron una más grande, probablemente por el nacimiento de su sexta hija: Athena.
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En diciembre del año pasado los Fury estrenaron su nueva vivienda, la cual adquirieron por una suma de 1,7 millones de libras (algo cercano a los 8 mil 700 millones de pesos).
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“Amo mucho este sitio porque está en la playa. Todo el mundo me conoce. Vienen aquí a por un té y aprovechan para tocar a mi puerta, eso es todo", contó Fury en una entrevista para 'The Mirror'.
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