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Carlos Alcaraz, en el Roland Garros
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Carlos Alcaraz protagonizó la mejor jugada del Roland Garros 2022: una locura lo que hizo en cancha

Velocidad, defensa, garra, jerarquía, lucha, de todo hizo el tenista español, quien recibió aplausos de todos.

Carlos Alcaraz (N.6), uno de los grandes favoritos al título en Roland Garros, tuvo que levantar una pelota de partido en contra para ganar a su compatriota Albert Ramos (N.44), mientras que Nadal, 13 veces campeón en París, volvió a dar una lección ante el francés Corentin Moutet (N.139).

Alcaraz, 19 años y la gran atracción del circuito esta temporada, superó al veterano Ramos por 6-1, 6-7 (7-9), 5-7, 7-6 (7/2) y 6-4 tras una batalla épica de 4h34 de juego.

El joven español comenzó arrollando a su compatriota, pero Ramos comenzó a hacer daño a partir del segundo set a Alcaraz atacando su revés con pelotas altas, que llevaron al murciano a cometer numerosos errores (74 en todo el partido por 54 de su rival) y perder los dos siguientes parciales.

Y Ramos, de 34 años y con más de 550 batallas en el circuito llevó a Alcaraz a una situación límite al disponer de una bola de partido en el cuarto set.

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"Ahí me puse un poco nervioso, pero me encanta jugar este tipo de batallas y sabía que si la salvaba todo podía cambiar", admitió Alcaraz en conferencia de prensa.

La salvó y forzó el quinto set, aunque no se acabó el sufrimiento para Alcaraz, que en el parcial decisivo volvió a verse 0-3 abajo en el marcador.

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Pero Alcaraz tiró de esa derecha que ya le ha llevado a hacerse un nombre en el circuito y unido a los problemas físicos de Ramos en el tramo final, el murciano cerró el partido tras una batalla épica de 4h34 de duración, "el partido más largo de mi vida" y "una lección para el futuro", aseguró el ganador.

Alcaraz también admitió que en un momento vio le partido muy complicado: "Después de perder el tercer set si es verdad que me veía inferior a Albert y que podía perder, por lo que tenía que cambiar algo y no dejar de creer en mí, porque sabía que iba a tener mis oportunidades".

Y mientras Alcaraz y Ramos disputaban un duelo épico, Nadal estaba... "jugando al parchís", tal como reconoció tras ganar a Moutet en la sesión nocturna por 6-3, 6-1 y 6-4.

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